Algunos de mis alumnos de Yoga respondían mal a las propuestas de la Meditación. En vez de dejar que la mente expusiese gradualmente sus contenidos, se revolvían inquietos a los pocos segundos de empezar, abrían los ojos de manera intermitente, tosían, carraspeaban, se tocaban el rostro, hacían muecas de disgusto. Estaba claro que temían profundizar demasiado en sus entretelas; faltos de riqueza interior en forma de percepciones, sensaciones, ideas, emociones y sentimientos elevados, sin una mínima sabiduría existencial, su instinto en esos momentos les decía que podían caer directamente en el vacío que subyace a sus mayores honduras. Con un susurro al oído me rogaban que les permitiera salir de clase y acudían presurosamente a matar el tiempo de algún modo. Matar el tiempo... justo lo que hacen ahora esos ancianos del pueblo que me ven pasar, camino de la piscina municipal, con expresión neutra y un silencio cargado de tedio o enredados en conversaciones espúreas con otros colegas mirones. Horas después, cuando regrese a casa, me los encontraré exactamente en el mismo sitio y en la misma postura petrificada. Matar el tiempo... como hacen quienes abusan de las pantallas y se aturden con los mil vericuetos de los dispositivos on line; como hacen entre visillos tantos vecinos al acecho de las andanzas, entradas y salidas de los otros. Matamos el tiempo de un millón de maneras distintas queriendo, inconscientemente, matar el vacío, nuestro vacío. Pero el vacío elemental puede cubrirse, enmascararse, taparse con el increíble arsenal de fruslerías y ocupaciones banales a nuestra disposición; nunca llenarse, anularse, matarse, porque aquéllas son demasiado fugaces e insustanciales para lograrlo. Matamos el tiempo pero el vacío siempre está a la espera, es muy paciente y tiene a su favor ese tiempo que, en realidad, y a la postre, resulta que tampoco hemos matado.
ENTRE DOS LUCES
El Blog de Juan Ignacio Herrera García
viernes, 1 de agosto de 2025
jueves, 3 de julio de 2025
LA ERA DE LAS CONSECUENCIAS.- (8)
Algo extraño sucede en el Océano Austral que rodea la Antártida y el Polo Sur. Desde hace muchos siglos, sus aguas superficiales cargadas de sal y calor capturan el CO2 de la atmósfera y se hunden con él a grandes profundidades, dejándolo secuestrado allí permanentemente. Por contra, ascienden en su lugar aguas menos saladas y muy frías que fomentan la expansión del hielo marino por muchos millones de kilómetros cuadrados... Bueno, esto ocurría hasta el año 2015. En la última década el proceso se ha invertido por completo y el mar está devolviendo a la atmósfera el anhídrido carbónico que le fue quitando metódicamente. ¿A qué ritmo?. ¿En qué cantidades?. Tal vez sea preferible no enterarse. Total, ya... De momento, la extensión del hielo marino antártico se ha reducido en más de tres millones de kilómetros cuadrados y toda la circulación oceánica y atmosférica del planeta ha sufrido grandes alteraciones.
El Mediterráneo, por su parte, carga sus pilas con la tremenda energía térmica de 3°C por encima de lo normal de sus aguas superficiales (hasta 5°C en algunos sectores) y con mucha mayor cantidad de agua evaporada y luego precipitable, a veces en trombas aniquiladoras. Nuestro querido Mare Nostrum ya está rifando, pues, sus próximas danas por toda la cuenca. ¿A qué ciudades o pueblos españoles les tocará?. ¿Al litoral murciano, a Alicante, a Castellón, a Barcelona, a Cadaqués?. Averigua tú.
lunes, 19 de mayo de 2025
EL SENTIDO DEL MISTERIO
Los niños y niñas sanos suelen crecer con un sentido del misterio que se expresa como curiosidad insaciable, espíritu juguetón y de aventura, facilidad para maravillarse y una marcada propensión soñadora. Más adelante, el modelo de educación recibido y la progresiva inmersión en el mundo de los adultos erosionan dicho sentido rápidamente, que ya tan sólo sobrevivirá en una exigua minoría de individuos. Y, sin embargo, el misterio lo llena casi todo, pues apenas conocemos un poco del Universo. Pero nos apresuramos a sustituirlo por toscos e ingenuos relatos sobre el más allá, la divinidad, las utopías ideológicas y otros temas parecidos con marca de fábrica garantizada y etiqueta de infalibilidad. Legiones de ilusos los abrazan con entusiasmo creyéndose profundos y sensibles. En realidad, quienes no conserven una pizca siquiera del sentido del misterio están más muertos que vivos, como todas esas personas colgadas de las pantallas la mayor parte del tiempo, aunque piensen lo contrario. El sentido del misterio te impulsa a explorar la realidad, a ir a mirar y ver lo que hay al otro lado de la montaña, la selva, el mar y la galaxia, a contemplar el firmamento asombrado y amar sin condiciones.
martes, 15 de abril de 2025
CLARIDAD
Esto es para quienes desean ir a mirar y ver más allá del horizonte.
CLARIDAD
Claridad, un dulce anhelo
desde el fondo de la confusión.
Claridad, un impulso
hacia la turgente limpidez
de los días despejados
y las noches tibiamente azuladas.
Claridad, íntima necesidad
de disipar la niebla
de los sueños vagamente caprichosos.
Claridad, ese prodigio imborrable
de ponientes y lejanías,
amplitudes y marejadas,
al transponer la desembocadura
del ancho rio que nos lleva
hacia la mar abierta y profunda
desde montañas ya olvidadas.
Claridad, esa palabra milagro
al fin arduamentte hallada
tras desenmarañar bulos,
desmentir noticias falsas,
desmontar relatos trucados
y deshacer turbios malentendidos.
Claridad, esa certera visión del área contraria
y de los requisitos para el gol
después de una sutil conducción
de la pelota cosida
a unos hábiles pies
y a una mente panorámica.
Claridad, ese don especial
de la conciencia vacía
de trastos argumentales con perfiles de autoengaño,
cinismo y coartada.
Claridad, esa maravilla inaudita de tan rara,
sólo al alcance de los seres
liberados del caos interno y externo,
envueltos en la inmensidad
diáfana y esplendente.
Claridad, siempre un camino sin dirección,
siempre una meta voluble y evanescente.
jueves, 3 de abril de 2025
ABRIL
Cuando sientes que el tiempo se detiene
abril es sólo una burbuja
en el tibio espacio ilimitado¡
tu cuerpo flota, ingrávido,
sobre el abismo sin fondo
de lo eterno y lo fugaz
con un mareo embriagador;
porque el vértigo es tan dulce
que podrías morir así,
encantado con la existencia
y con la no existencia.
¡Es todo tan leve.
tan deliciosamente ligero y sutil
que esa delicada evanescencia
cifra en tales momentos
el sentido de tu vida
y de la tenue realidad
de la que formas parte!.
Porque al nivel más hondo
de las cosas,
a la escala más fina y remota
de todos los Universos
habidos y por haber,
se es nada más que un soplo
de neutrinos y fotones.
la danza de un grácil bucle
enamorado de otros bucles,
la armoniosa vibración
de una cuerdecita invisible.
Cuando sientes que el tiempo se detiene
y la estrella de Planck
rebota tras su caída,
el agujero negro se vuelve blanco
y la oscura sombra de tu sinvivir
refulge, liberada,
en un glorioso estallido de luz.
¡Qué bella y hechicera
es la magia de abril!.
viernes, 7 de febrero de 2025
ASTEROIDE
Emerges desde lo oscuro
con tus fulgores de plata
arrancados por el Sol
a tus entrañas porosas.
Dormitas tu eterno viaje
por el vacío silente
bordado de estrellas y nebulosas
sin soñar siquiera el recelo
que tu paso sideral despierta
entre raras criaturas
medrantes sobre la Tierra.
Surcas, impávido, la nada envuelta
em miríadas de canciones
que.brotan de la corteza
de este planeta enfermo,
hendida por trenes de ondas hertzianas
que harán saber al Cosmos
de la existencia de una especie consciente
tan ambiciosa como efímera.
Volverás tu cabeza de níquel
para mirar brevemente
esta esfera blanquiazul
y su pululante contenido,
y después seguirás tu tranquila deriva
por abismos espaciales que no conocen
ni principios ni fines,
que vulneran cualquier límite
con su expansión desenfrenada.
Bienvenido, pequeño asteroide.
Causas sensación aun sin pretenderlo.
Ya eres famoso entre las grandes multitudes.
Cuéntaselo a tus congéneres
de la lejana nube de Oort
cuando los siglos se hayan convertido
en milenios
y éstos en millardos.
jueves, 16 de enero de 2025
LO TENEMOS BIEN CLARO
"Antes el fin del mundo que renunciar a mis sueños materiales".
Dos mil millones de privilegiados (en comparación) también lo tienen claro:
"Antes el fin del mundo que cambiar mi estilo de vida y mis hábitos de consumo, limitar mis prebendas, mermar mi estatus social y consentir una posible reducción de mi patrimonio".
Por su parte, las élites y superélites económicas y políticas (CEOS de las grandes corporaciones multinacionales, banqueros, financieros y empresarios descollantes, Gobiernos de cualquier pelaje, instituciones y fundaciones diversas, y la gran masa de votantes y compradores habituales, lo tienen aún más claro:
"Antes el fin del mundo que el fin del capitalismo".
Así las cosas, ¿qué creéis que se va a acabar antes?.
Yo también lo tengo claro.
"
domingo, 12 de enero de 2025
HUMOR, MUCHO HUMOR
Abundando en el sentido del humor que mencionaba ayer, siempre se ha necesitado para afrontar las distintas vicisitudes de la vida; pero ahora es indispensable, y en grandes cantidades, ante el panorama que nos ofrece el futuro, tanto individual como colectivamente. Y yo ando tan escaso de él... ¿De dónde lo sacaré?. ¿Cómo?. Tendré que apañármelo de algún modo, porque me niego a caer en la amargura, el derrotismo y la depresión....¡Ah, no!, no soy ya derrotista ni catastrofista ni apocalíptico, aunque muchos penséis lo contrario. Simplemente, tengo suficientes elementos de juicio para saber lo que puede pasar con una alta probabilidad (del 90% o más) y quiero vivir lo que me queda con el mejor humor posible. Encima no voy a hacerle concesiones enfermizas al factótum de nuestra especie, o de la existencia, o de lo que tantos y tantos llaman ingenuamente el destino. Conque, haciendo un gran esfuerzo, veré si llego a ser capaz de aderezar mis días con un fino humor entre amable y socarrón, tiernamente irónico y comprensivo. Porque transmisor de una información independiente, honesta y fiable, por dura que sea, sí. Pero yo, de plañidero, nada.
sábado, 11 de enero de 2025
UNA BUENA MEZCLA
Admiro a las contadas personas que reúnen un gran sentido del humor, una vasta cultura, un notable conocimiento del mundo real, afabilidad y empatía, una mente abierta y proclive a mirar las cosas y a los demás con suficiente amplitud de perspectiva, y, por supuesto, un agudo juicio crítico vuelto también hacia sí mismo. Lo más difícil es saber conjugar todas esas cualidades. Si, al final, la mezcla es buena, en dosis y proporciones acertadas, tendremos a alguien cortés, educado, discreto y con sumo tacto, capaz incluso de un trato social lleno de tolerancia, comprensión y un punto indulgente. En mi opinión, todo esto resume y expresa una de las más altas formas de inteligencia. Rara, ¿verdad?. Pues de ahí mi gran aprecio por ella.
jueves, 9 de enero de 2025
NUESTRA ZONA DE CONFORT
También necesitamos nuestra zona de confort mental en la que podamos sentirnos a gusto, protegidos, seguros y a salvo. Para preservarla intacta muchos filtramos cuidadosamente los pensamientos, emociones, sensaciones y sentimientos internos a la vez que cualquier estímulo procedente del entorno; sólo admitimos aquellos que aumentan nuestra alegría y satisfacción, nos producen placer y regocijo, son amenos y entretenidos, avivan nuestros sueños y anhelos, y colman nuestros deseos y apetencias. En particular, dedicamos nuestro tiempo y atención a aquellos mensajes de los distintos medios de comunicación, de libros y revistas y de redes sociales que refuercen nuestras creencias religiosas, convicciones políticas y nuestra personal visión general de la existencia y de la realidad. Ante cualquier parecer ajeno que desafíe o cuestione esos principios, dejamos instantáneamente de leer o escuchar y desviamos la mirada hacia otro lado. Es humano. Debemos comprenderlo. En ocasiones la vida es muy dura y nos exige luchar denodadamente para abrirnos paso, como en la jungla, través de su intrincada y espesa maraña. Y nuestras fuerzas se agotan. Nuestra mente se cierra y echa el candado. Nuestro corazón encoge: hasta se endurece. ¡Somos tan precarios y vulnerables en el fondo! . No podemos poner en peligro nuestra propia leyenda de los Reyes Magos de Oriente (ver el post anterior), nuestra zona de confort privada.