SEGURIDAD (2)

Hurgando un poco más en el tema de la seguridad, se me ocurre que la sociedad que hemos creado entre todos, por acción y omisión, es contraindicada para ella. Hace dos meses saquearon mi hogar; me han atropellado seis veces vehículos a motor y sin motor; por un pelo no me despeñé en el cabo de Creus; desahucian de su casa a ancianos enfermos terminales con la complicidad de los gobiernos; ciento veinte millones de personas se ven privadas de su trabajo, novecientos millones de un simple trozo de pan, dos mil millones de agua potable, setenta millones de la vida cada año....La lista de inseguridades básicas sería interminable, como bien sabéis. Somos un grave peligro los unos para los otros. Consciente de ello, San José de Costa Rica se enreja masivamente desde el tejado hasta el suelo. Deprime mirarla. Menos mal que todavía sobreviven muchas bellezas naturales de ese país. Pero la ciudad parece una gigantesca cárcel en la que encierran y se encierran sus propios habitantes. Es patético. El pensamiento egocéntrico que ha creado nuestro mundo es patético. Y, desde luego, nada seguro.